Cada marca tiene un comienzo.
El de Paolina Cattorini nace de una certeza: cuando conectamos con lo esencial, todo florece.
Renacimiento porque esta cápsula marca un nuevo ciclo. Una vuelta al origen, al propósito, al diseño con sentido. Es la decisión de crear desde el alma y poner al servicio el saber, el arte y la experiencia.
Gratitud porque cada pieza honra el camino recorrido, las raíces, los vínculos y los aprendizajes que nos trajeron hasta acá. Porque agradecer es también reconocer el valor de lo artesanal, de lo lento, de lo auténtico.
Renacer con gratitud es elegir una forma de estar en el mundo.
Una forma de crear. Una forma de vestir.





